Encontrar todo un bistrot en un mar de pequeñas calles, en el centro de Madrid, a mitad de camino del Barrio de Malasaña y la Gran Vía, es una agradable sorpresa. Le PatrÓn (www.lepatron.es)es un pequeño local, situado en la calle Barco, 27, que llama la atención, en primer término, por su delicada decoración.
Nada más entrar la vista se te irá a una amplia mesa, en la que pueden comer desahogadamente seis comensales, siempre adornada por flores frescas y rodeada por pequeños detalles de buen gusto. La sensación general es de comodidad, a pesar de las dimensiones del local, que tiene en su interior otra sala con tres mesas, así como una pequeña barra en la entrada.
En cuanto a la comida, no hay duda de que los platos son el resultado de una medida elección, así como de una cuidada elaboración. Todo tiene un cierto toque que te permitirá diferenciarlos en tu memoria, aunque el nombre de los platos te resulte conocido. Sin más preámbulos, te recomiendo, para empezar, el Duo de Foie, la Ensalada de Espinacas, el Tiradito de Atún Rojo Nikkei o la Burrata D´Italia.
Como platos principales, la Ratatuille & Tuna, perfecta, así como el Arroz Le PatrÓn con puntillas o el Solomillo de Buey, sin olvidar el Taboulé & Brocheta de Pollo o el Pollo Tai.
Como platos principales, la Ratatuille & Tuna, perfecta, así como el Arroz Le PatrÓn con puntillas o el Solomillo de Buey, sin olvidar el Taboulé & Brocheta de Pollo o el Pollo Tai.
Una acertada decisión puede ser el compartir tanto los entrantes como los platos principales, ya que el tamaño de unos y otros lo permite, son abundantes sin llegar a la exageración, todo en su justa medida.
En cuanto a los postres mención aparte merece el Tiramisú, aunque también son bien recibidas la Tarta de Manzana y la Mousse de Chocolate. Una ajustada y correcta elección de vinos te permitirá dar más color a tu comida.
Para completar tan acertada elección, Le PatrÓn ofrece, de lunes a viernes, el denominado "Plato del día", que te permite comer, estupendamente, por tan solo 9 euros, eligiendo entre una pequeña selección de platos de la carta principal, sin menoscabo en su calidad ni mucho menos en la cantidad, lo que supone todo un ejemplo de seriedad y voluntad de agradar a la clientela. En estas cosas es donde se nota cuando en un local se quieren hacer las cosas bien.
El referido "Plato del día" se puede acompañar con un copa de vino, a elegir entre las denominaciones de origen Rueda, Montsant o Navarra, existiendo la posibilidad de optar por cerveza o aguas minerales italianas. La verdad es que no se puede ofrecer más por 9 euros.
Más aún, si a ello añadimos una cuidada atención, próxima, sencilla, pero no por ello menos profesional. Le PatrÓn es una buena opción, tanto al mediodía como por la noche, en prolongadas veladas.
Como, seguramente, te estarás preguntando cuál es el secreto de tan acertada elección, te adelanto que Le PatrÓn tiene un auténtico toque francés, inevitable. El resto te corresponde a ti no solo descubrirlo, sino ser parte de él, ya que se trata de un lugar en el que los clientes también son protagonistas de su historia, vívela.