Un mundo de ilusiones

Quizás puedas pensar que estás ante un blog de viajes, hoteles inaccesibles o artículos de lujo. Realmente ante lo que estás es ante un mundo de ilusiones. Las ilusiones por las que un artesano imagina unos zapatos, las que siente un cocinero para crear un nuevo plato o las que llevan a alguien a dejarlo todo para abrir un hotel en un apartado lugar. Esas mismas ilusiones son las que tú puedes sentir cuando entres en este blog, será el primer paso para iniciar un viaje, conocer ese hotel, probarte unos zapatos y, sobre todo, serán ilusiones que compartirás con otros, porque de entre todas las ilusiones de esta vida, las mejores son las compartidas.
¡Disfrútalas!

19 de junio de 2011

AROMA DE BOJ: Si puedes atrápalo

El Boj es un arbusto siempreverde, originario de Europa, con el que te encontrarás de forma casi rutinaria, dadas las muchas funciones que puede realizar: como limitador de un parterre, como seto, escultura en nobles jardines, aislado o plantado bajo otro árbol o incluso de forma individual, con cierto aire autosuficiente. Los más elegantes y glamurosos Bojs se encuentran en París, en la Avenue Montaigne y en Madrid, junto al Museo del Prado.


Definir el aroma de Boj podría resultar hasta fácil, ya que se trata de un olor penetrante, agrio y, a veces, casi amargo. No resulta fino, ni dulce, pero sí profundamente atrayente, intenso y almizclado, pero lo que resulta ciertamente difícil es relacionarse con este aroma, ya que se trata de un aroma huidizo, esquivo, que no se encuentra en las hojas del arbusto, ni siquiera en la madera, sino que, de forma desigual y caprichosa, irás percibiendo según te acerques o alejes de la planta de Boj.



Puede que este juego de aromas penetrantes y a la vez fugaces te haga recordar a personas que hayan ido apareciendo por tu vida de igual forma, porque, aunque quizás no lo sepas, el aroma de Boj representa a un tipo de personas, aquellas que quieren estar y a la vez no estar, mostrar e igualmente ocultar. Seguro que conoces a alguna.



Pero no te preocupes por ello, el aroma de Boj afortunadamente no solo se encuentra en los jardines y en las personas, lo puedes encontrar, por ejemplo, en los grandes vinos de Burdeos, entre otro muchos, ya que en el mosto de la uva Sauvignon se encuentra una molécula, la mercapto-4-metilo-4-pentan-2-ona, que proporciona un poderoso aroma de Boj, también denonimado aroma de retamas. 




Hablando de grandes Sauvignons, en Burdeos, más concretamente en la tierra del medoc, no podemos dejar de nombrar al inigualable Pavillon Blanc de Chateau Margaux (www.chateaumargaux.com) o a las apelaciónes de Sancerre y Pouilly Fumé, en el Valle del Loira. Más cerca te recomiendo un excelente Sauvignon, el Gramona Sauvignon Blanc 2010, un vino de unos 15 euros, que puede resultar muy adecuado para acompañar toda una comida. Posee un color amarillo pajizo, complejo en nariz, con recuerdos a frutas exóticas de huesos, entre otras, que nos sumerge en un ramillete de hierbas aromáticas y frescas. 




En boca, es suave, amplio y untuoso, con un largo final en el que vuelve el peso de la fruta, el monte bajo y los minerales. Todo un acierto. Además, tratándose de Gramona, es una elección fácil, ya que estamos ante el más noble y elegante viticultor de nuestro país, autor de los mejores cavas y de los más premiados vinos blancos y rosados que hay en el mercado. A los vinos de Gramona (www.gramona.com), como a los grandes museos, siempre hay que volver.




Pero el ya complejo y sorprendente aroma de Boj no solo se encuentra en los jardines, los vinos o en las personas, sino, como no podía ser de otra manera, se encuentra en gran número de perfumes y colonias que dan luz a nuestras vidas, como Mandragore Perfume de Annick Goutal (annickgoutal.com) o la fragancia Untitled - Sin Título de Maison Martin Margiela(www.maisonmartinmargiela.com), así como en algunas otras del fascinante Serge Lutens.(www.sergelutens.com




Espero que el descubrimiento del aroma de Boj te acerque a otros muchos. Piensa que si algún día consigues ordenar tus aromas, habrás ordenado tu mundo. Así de fácil.

2 comentarios:

  1. Una entrada muy interesante, ya que creo que tengo buena nariz y presumo de ser un gran receptor de olores. Y de ser sensible a ellos, también. Es verdad que su poder evocador supera el de otro sentidos.

    Me ha parecido muy inspirado el tema tratado. ¿A quién se le ocurriría hablar del aroma de boj y de su presencia en distintos soportes? Ciertamente original.

    Hay que tomar nota de esos vinos por si se diera la ocasión de acudir a ellos.

    Me gusta el aroma del boj, coincido en que tiene mucha personalidad. Para mí siempre suele el comienzo del disfrute del paseo, ya que en los jardines que visito me lo suelo encontrar a la entrada de otros espacios con nuevos aromas y distintas coloraciones.

    Abrazos.
    Andrés

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  2. Me recuerda el aroma algunos valles de Pirineo, asociado con la paz, armonía y alta montaña

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